Nana

- que si quiero cambiar el mundo? no, para ser sincero el mundo me parece bien. Pero si me gustaría que algunas cosas fueran diferentes. Por esa tonta manía de pensar que en realidad todo (en la mas general de las expresiones) es en realidad mucho más simple.
- y eso te pone mal? porque digo, es como una idea utópica.. Y andas tan.. Tan cansado, como vos decís.
- en algún momento de mi vida se me cruzo la sensación de que utopía era algo tan finito como el conocimiento del hombre. Será que la historia va demostrando que a medida que el conocimiento y nuestra tan amada ciencia van progresando; aquellas viejas utopías quedan atrás, de una forma u otra.
- pero aun así hay cosas que no vamos a cambiar. Es así, también simple.
- no soy optimista, lo sabes. Pero si creo soy una persona que considera siempre hay opciones, aun si estas no nos gustan demasiado. A diferencia del optimista (quizás en extremo) que siempre ve una solución plausible y favorable, yo creo que saber cuándo perder, retirarse, o cualquier otra opción que en principio no sea favorable es más productiva. Es aprender a crear una segunda oportunidad o quizás a no perder otras por seguir en algo que en este momento requiere demasiado esfuerzo.
- y no te contradecís con eso? porque te veo como estancado, casi resignado a una situación. Por qué entonces no hacer un paso al costado, atrás, de lado, como quieras expresarlo y retomar otras tantas cosas que aun son viables.. Sonreír. No te contradecís?
- vos sabes que me gustan mucho los juegos, y sobre todo los online. Entre ellos los de rol donde cada jugador elije al principio del juego, justamente un rol. Un buen jugador en líneas generales no solo debe conocer su propio rol, sino también tener una idea general de los demás roles. Ya sea para actuar ofensiva o defensivamente. En particular, y sobre todo en este juego del que te cuento, hay dos roles que no solo deben conocer muy bien su papel, sino saber casi a la perfección el de los demás. El chanter y el cleric deben sin excusas ser aun mejores jugadores de otros roles que aquellos que los juegan. Estos dos personajes tienen la función de hacer de soporte del resto de los jugadores.
- el chanter es de esos que curan heridas?
- no, el chanter es el que mantiene la moral, por así decirlo, pero su función principal es cuidar al cleric, que es el que cura. Las habilidades del chanter están orientadas a ser el "buffer" de sus compañeros. La magia que usa mejora las habilidades de los demás compañeros o deshabilita algunas de sus enemigos. Y las pocas, pero efectivas formas de dañar, solo las usa para mantener a salvo a su cleric, quien realmente se encarga de curar a los demás. El chanter es, mas allá del líder del grupo, quien decide si la batalla es sostenible o no. es quien tiene en su cabeza cada stats propio, aliado y enemigo. Quien sabe con precisa exactitud las capacidades actuales del grupo en cada segundo de batalla. Cuando entrar en ella, cuando evitarla. El que reconoce cada situación y evalúa en microsegundos cientos de probabilidades. El que empuja, alienta, aconseja y en la más grave de las situaciones, el ultimo en irse. Su función es asegurar que los demás sobrevivan a cualquier precio. Que lleguen. Que alcancen la victoria o el simple regreso a casa. Que se superen, que den su mejor esfuerzo porque vos estas ahí aportando el estúpido punto extra de cualquier cosa para que lo logre.
- parece mucha responsabilidad, estas exagerando.
- no, la verdad que no. en un ideal de grupo tenes el tanque que es quien no hace mucho daño pero puede recibir toneladas del mismo. El DPS que pega poco pero muy rápido, de cerca o de lejos. El nuker que te hace ver estrellas en un solo golpe. Estos dos últimos son muy frágiles, no soportan mucho daño. Y también está el archiquerido por todo el mundo, el paladín.. Tiene un buen daño y aguanta bastante, es el clásico de muchos porque es con uno de los pocos que podes andar solo. Y al final los chanter y los clerics. Pocos aguantan esos roles. Si las cosas salen bien fue el grupo (en el mejor de los casos) o el paladín o el tanque o el DPS que "bajo" a todo el mundo porque nadie le pudo tocar un pelo. Pero cuando las cosas no salen tan bien, o empiezan a ir un poco mal, son el chanter y el cleric los culpables. No llego el heal, no salió un stun. Alguien puso mal el silence, no tenes dedos, como no vas a ver a tal y un largo blah blah blah.
Se olvidan del, no te mandes todavía, espera que tenga listo tal cosa, no vayas por ahí, cubrí la derecha que esta floja, no te alejes tanto y tantas otros indicativos de situaciones calculadas que tanto el chanter como el cleric están diciendo todo el tiempo, y que lo hacen porque ven la batalla desde un paso más afuera, porque no dejan de tener en su cabeza una visión global de las situaciones. De calcular los recursos de los demás y los propios. Porque son los únicos que tienen la estrategia en la cabeza mientras los otros aplican las tácticas. No se olvidan de sus roles, se olvidan de que es un grupo y cada uno necesita de los demas.
En toda mi vida solo encontré una cleric con la que podíamos mantener batallas durante horas sin importar si los demás tomaban o no nuestros consejos. Resistiendo hordas de enemigos alocados, calculando con precisión cada variable, cuidando uno del otro y siendo los últimos en irnos si la retirada era la mejor opción. Reconocidos aun por aquellos que nunca nos habían enfrentado, o peleado a nuestro lado.
- bueno, decir toda la vida es exagerado, no jugas desde hace tanto tiempo y además, nos súper fuimos de tema.
- he sido chanter desde el día en que nací.
- I really... te quiero mucho.

Anónimo
Llegamos tarde, o en el momento preciso, con la mirada buscando miradas. Se nos ocurrió enamorarnos al mismo tiempo. Pero debí ser mas previsor o vos menos incauta. Ya no importa. Ahora estamos los dos en este banco de plaza, con un cigarrillo en la mano mientras vos mirando al cielo le regalas grises suspiros a él que se escapo de tus besos. Mientras yo con otra pitada y sin moverme, me imagino dueño de ellos. Llegamos tarde, o en el momento preciso. Debí ser más previsor o menos incauto. Ahora estamos los dos haciendo promesas que no vamos a cumplir. Vos lo esperas, yo parto. Y en el horizonte de un recuerdo quedara nuestra venganza mutua, mi culpa abrazando la tuya y las lágrimas que no solté, dibujando tu sonrisa. De esos días en que dejas el respeto en los bolsillos.
Oportunista, seguramente. Aunque no quiero recordar cual de los dos. Quizás así te disculpe, quizás así vos me perdones. Te puedo contar que después vamos a caminar un rato largo; en silencio. Te puedo contar que no vamos a compartir la misma dirección. Aunque el próximo estornudo de esta gripe (ahora) compartida, me devuelva una sonrisa.